MUSEO ETNOGRÁFICO Y DE ARQUEOLOGÍA INDUSTRIAL. Chillarón de Cuenca.
Nace para rendir un sincero homenaje a las generaciones que nos precedieron, contribuyendo al conocimiento de las formas de vida de los pueblos de nuestra tierra. Este museo ha sido montado con objetos artesanos y sencillas máquinas manuales, utilizadas en el cultiva de las tierras y en las tareas del ganado, que son parte de nuestro historia y señas de identidad de un pueblo.
El principal objetivo que perseguimos es enseñar, de una forma lúdica y cercana, a generaciones de jóvenes y no tan jóvenes, todo lo referente al trabajo y a el ámbito de la vida familiar en sus distintas vertientes: cotidiana, tradicional, festiva, popular y social.
El principal objetivo que perseguimos es enseñar, de una forma lúdica y cercana, a generaciones de jóvenes y no tan jóvenes, todo lo referente al trabajo y a el ámbito de la vida familiar en sus distintas vertientes: cotidiana, tradicional, festiva, popular y social.
El museo está ubicado en un edificio de tres plantas, de reciente construcción y especialmente diseñado para este fin.
- La primera planta, en la entrada, nos encontramos con algunos objetos de la exposición y con unos paneles informativos acerca de la fundación del museo y la relación de personas que, gracias a sus donaciones, han hecho posible el montaje del mismo. La primera sala está dedicada a “Los trabajos y los días ” e incluye más de un centenar de piezas de diversos tamaños, todas ellas relacionadas con las labores agrícolas y el pastoreo.
- En el recibidor de la segunda planta nos encontramos con algunos objetos de gran valor etnográfico. A continuación, está el denominado “Cuarto de las almas”, donde se exponen fotografías de nuestros mayores. Seguida por la sala “El discurrir de los tiempos" donde encontramos vitrinas con útiles de la vida cotidiana y a su alrededor piezas de uso doméstico. También podemos ver una pareja de maniquíes vestidos con la ropa tradicional festiva.
- La tercera planta, dedicada a “Los rescodos del llar”, en la antesala con objetos para la matanza: una orza para guardarla, la mesa para el sacrificio del cerdo, el lebrillo para el adobo de chorizos y morcillas, etc.
Seguida por una simulación de una "Vivienda tradicional" de Chillaron y su comarca. Con zaguán de pequeño tamaño, techumbre de madera vista de calidad mediocre, solado de guijarro, hueco para las animales con sus pesebres y puerta de buen tamaño provista de ventanillo enrejado. La cocina es el alma de la casa, recinto de vida y confraternización de las gentes. En ella se guardan y se tienen todos los útiles necesarios para preparar el alimento de la familia y ahí se reúnen todos en torno a la lumbre en invierno. El piso suele ser de baldosa de barro cocido. Los rasgos de la alcoba de la casa suelen ser muy marcados y uniformes: una pequeña ventana al exterior, tamaño reducido con solo lo necesario para su uso, piso con loseta prensada de dibujo, el enlucido más fino y las vigas se disimulan con falsos techos de cañizo y yeso. Y por último, nos encontramos el cernedor; en él se cierne la blanca harina en la artes y se amasa para fabricar el pan, que después se arropa con los tendidos y se deja fermentar antes de entrar al horno, donde se cuece para el alimento de la casa.
Para visitar el museo se concertará la hora previo contacto telefónico:
665 84 00 33
665 84 00 33
La entrada al museo es gratuita, incluyendo la visita guiada y las diferentes actividades realizadas a grupos.
Nuestro propósito es compartir con todo el mundo,
nuestro "pequeño gran tesoro".